¿Por qué soy socio de Indupan?
Industriales panaderos de distintas comunas del país, responden destacando los beneficios o servicios que han recibido por su permanencia en esta asociación.
Cuando nos acercamos a algunas empresas que aún no son parte de nuestra entidad para invitarlos a integrarse, es muy frecuente que nos consulten sobre lo que recibirán al dar ese paso.
Entonces les entregamos un folleto o les explicamos cuáles son los servicios que brindamos gratuitamente a los socios y las oportunidades que se les han abierto a muchos por alianzas, convenios o informaciones que se otorgan.
Además les comentamos que por el hecho de estar en el gremio, pueden contar con el consejo profesional de un abogado, una prevencionista de riesgos, una tecnóloga en alimentos, una periodista y hasta de una diseñadora gráfica para labores o trámites que deban realizar en su empresa.
No obstante y pese a todo lo anterior, entendemos que la mejor forma de exponer lo que significa para un industrial asociar su empresa a Indupan, está en la experiencia de sus colegas.
TESTIMONIOS
Cesar Álvarez, dueño de panadería Santa Gema de San Joaquín, divide en 4 áreas los beneficios. En primer lugar la capacitación, ya sea en cursos como en seminarios, que le han permitido a él y a su equipo adquirir nuevas competencias.
En segundo lugar los convenios, “los que muchas veces nos han permitido tener descuentos, así como cumplir con mayor fluidez algunas tareas. Por ejemplo, la tramitación del seguro COVID”.
Luego valoró “la permanente entrega de información… Esto nos ayuda a estar al día con muchos temas legales y tributarios. En fin, poder cumplir con las normas y acceder a beneficios que da el Estado”. Tal información oportuna, así como las asesorías en terreno, “nos ayudan a cumplir en las fiscalizaciones”.
“Y además Indupan tiene un grupo de profesionales que nos asesora en la parte sanitaria y legal, lo que es un real aporte a la hora encontrar una solución”.
La señora Ángela San Juan, dueña de panadería Bulnes de San Bernardo, explica que lleva 42 años en Indupan. Ella destaca los aportes que ha recibido “en términos legales e informativos… Han sido muchos los beneficios… Como por ejemplo, apoyarnos para poder cumplir las normas que fueron cambiando constantemente en pandemia. No fue fácil, pero con las explicaciones que muchas veces nos dieron, fue menos complejo adaptarnos”.
“Ahora último –añade-, ayudándonos a conseguir personas que trabajen en nuestra industria. En realidad, tenemos varios beneficios. Pero no sólo eso. Hay que tener en cuenta que estar unidos nos hace mucho más fácil enfrentar los problemas, los nuevos desafíos y las exigencias”.
“También he participado en cursos y eventos, que por un lado nos ayudan a trabajar de mejor manera y a levantar la imagen de nuestra industria”.
Pedro Pablo Santesteban, dueño de Pan Colina, dice que como familia son socios por más de 50 años con las panaderías que han ido teniendo en ese lapso. “No dejaremos de serlo, porque para nosotros ha sido muy provechoso. Una de las razones fundamentales es que entendemos que la actividad gremial es muy importante. Tenemos que estar organizados como gremio, apoyarnos. Para eso Indupan ha sido un articulador muy importante, ya que ha unido voluntades en un gremio que está siempre bien atomizado. Somos muchas panaderías, de diversos sectores, con realidades distintas. Pero a través de Indupan nos podemos juntar y hacer cosas que solos serían imposibles”.
En segundo término, añade, “somos socios porque nos prestan apoyos en distintas áreas. Además, apoyo e información en diferentes temas. En esto yo podría destacar los datos sobre todo tipo de proveedores cuando uno tiene dudas. A veces no sabemos dónde adquirir algo, pero Indupan siempre tiene datos”.
“También valoro las inspecciones preventivas que nos hacen sus profesionales, a fin de corregir a tiempo cualquier tema en relación a la normativa sanitaria vigente. Ello es clave para cualquier empresa que produce y vende alimentos”.
Asimismo destaca “el apoyo que siempre nos han prestado en término de las negociaciones colectivas con los sindicatos. Esto ha sido muy importante…”.
“Como última cosa y tanto o más relevante que el resto, creo que estar en Indupan nos permite conectarnos y compartir experiencias con otros colegas, entender cómo funcionan las variables del mercado en distintas comunas… así uno puede comparar y ver cómo está haciendo las cosas”.
Maritza Valdés, dueña de panadería Olimpia de Independencia, puntualiza que “siempre es bueno estar afiliados a una organización que nos representa. Sobre todo ante problemas comunes que nos surgen. En este último tiempo, más aún, con las alzas que prácticamente enfrentamos todos los días en los insumos. También ha sido bueno estar unidos ante las dificultades que hemos tenido para encontrar personal. En ese sentido nos hemos sentido apoyados. En algunas oportunidades nos entregan datos… En todos estos años nos hemos sentido acompañados”.
“Además debo destacar que las distintas actividades que realizan, ya sea el concurso de La Mejor Marraqueta, el Día del Choripán en Marraquetas, la cena de industriales, así como la feria de panadería y pastelería (Fipach), levantan la imagen de nuestra industria ante los clientes y todo el país”.
Gustavo Acuña, dueño de productos Vollkorn, está en Indupan desde el 2007, año en que compró la panadería. “Siendo nuevo en el rubro, consideré que era importante acercarse a gremio para recibir asesoría y guía en las múltiples decisiones que debía tomar”.
“A lo largo de este tiempo he recibido múltiples beneficios. Por ejemplo, viajes a costo reducido para visitar ferias internacionales, incluyendo conocer la realidad de las panaderías locales en el caso de Alemania. También se hizo un curso de un año de duración para supervisores y jefes de panadería, con excelentes resultados. A su vez hemos participado en varios cursos para mejorar las condiciones de mejoramiento operativo y/o condiciones especiales como la reducción de sal. Finalmente, cada vez que he necesitado ayuda y/u orientación, me he encontrado con un equipo con mucha voluntad para solucionar mis inquietudes”.
Jaime García, dueño de panadería Santa Julia de Ñuñoa, dice que no sabe desde qué fecha sus padres eran socios de Indupan, pero que “desde chico yo escuchaba que para cualquier problema que tuvieran, legal o laboral, contaban con apoyo. Además se mandaba a los trabajadores a capacitarse en la asociación o por convenios que ella tenía”.
“Entiendo que en algún momento pueden verse colapsados por la cantidad de gente que tienen y pide ayuda, pero por mi parte tengo la convicción de que siempre se ha entregado apoyo, ya sea legal o laboral”.
“En los últimos 2 ó 3 años ha mejorado un montón el tema de la cercanía con el industrial panadero. Yo siento que están siempre pendientes de hacer actividades. En sí me siento apoyado y respaldado por Indupan…. Por cualquier cosa yo llamo y recibo una respuesta”.
Comments